martes, 10 de abril de 2012

Trabajo alternativo seminario de Historia.


Contexto: 1º de bachillerato, unidad 3: Geometría.
Una vez explicados los lugares geométricos del plano (puntos, rectas, etc.) y finalizada la presentación de las cónicas (circunferencia, elipse, parábola e hipérbola) introducimos el siguiente hecho histórico que, además, nos ayudará a refrescar la unidad 2.
Se trata del momento histórico de la representación del 0,que como todos sabemos fue posterior a todos las demás cifras. La ambigüedad y la necesidad de representar esa cifra para la lectura correcta de las cifras.
<<Aunque fueron los indios los que propagaron e inventaron el concepto, éste ya existía, bajo otra forma y otra filosofía, mucho antes con los babilónicos.
Inicialmente, se representaba con un simple espacio vacío entre las cifras y además se le llamaba “shûnya” que poseía el significado de vacío (también cielo,atmósfera,etc.), lo no creado, el no ser, lo no presente, la nada, etc.
Más tarde, los sabios de la India decidieron que el término “shûnya” se adecuaba perfectamente para expresar la noción de ausencia de uno de los elementos del número: unidad, decena, centena, etc. Pero, a pesar de haber sido aceptado como concepto, ¿cómo podían representarlo?.
El círculo, la primera representación del 0: de acuerdo con L. Renou y J. Fillozat, las ideas de cielo, espacio, atmósfera o firmamento, presentes en las primeras representaciones de vacío y de cera, llevaron a la realización de dibujos o signos que representaban la bóveda celeste: un semicírculo o un dibujo circular o, más sencillamente, un círculo.
El punto: un objeto “cerodimensional”, la segunda representación gráfica del cero: ¿de dónde procede el hecho de que el “punto” fuese también una de las primeras representaciones simbólicas de cero? Para responder a esta pregunta, nos valdremos de una metáfora bastante conocida: “el libro que tiene en sus manos es un objeto tridimensional, con largo, ancho y espesor. Imagine que la mano de un gigante lo aplasta en todo su espesor. Sólo quedarán dos dimensiones, un gran rectángulo, un plano: largo y ancho. Imagine ahora que la mano del gigante cae nuevamente sobre ese rectángulo. Sólo quedará un objeto de una única dimensión, la recta. Y si el gigante se empecina en su afán destructor, sólo quedará un objeto de dimensión cero:¡el punto!”
El punto “vacío”, la tercera representación del cero: fue utilizado en las regiones de Kashimir. Era lógico que los indios quisieran buscar la mejor aproximación de lo que podía representar el vacío, la nada...

La evolución del concepto del cero terminará haciendo de él, de un simple signo de notación “de la ausencia”, un auténtico número, que designa la cantidad nula.
¿Cómo una cantidad vacía creó tantas historias?>>
Thais Miralles Jordán.

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